Un joven y sus amigos rentaron una casa en Chelem para pasar el “puente”; el desafortunado murió en plena fiesta
Progreso.- Este fin de semana se registró una tragedia en la comisaría de Chelem, pues un joven de tan solo 22 años de edad terminó perdiendo la vida en una vivienda veraniega, en donde se había reunido con sus amigos para pasar el “puente” de la Revolución.
Según corrió el chisme, el grupo de jóvenes había rentado una casa ubicada entre Chelem y Chuburná, aparentemente se trataba de un grupito de entre 10 hombres y mujeres, de entre 20 y 22 años.
El grupo había llegado desde el sábado 18 de noviembre y tenían previsto quitarse hasta hoy, lunes 20 de noviembre, pasando así su fin de semana entre amigos.
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A pesar que la casa no se encuentra a la orilla de la playa, sino a unos 100 metros de la costa, la vivienda cuenta con piscina. Lo anterior fue chismeado por los vecinos.
Quienes fueron testigos del trágico hecho, pues en la madrugada del domingo se despertaron tras escuchar las sirenas de las ambulancias y patrullas de la Policía Estatal.
Basándose en la información recopilada, se dice que desde la tarde del sábado y hasta la medianoche, los jóvenes presuntamente consumieron bebidas alcohólicas, probablemente enervantes.
Viaje a la playa termina en tragedia
Igual, los chavos se bañaron en la piscina, pero la fiesta juvenil se suspendió inesperadamente cuando uno de los jóvenes grito asustado que había un muerto, aunque no se sabe si se ahogó o le dio congestión alcohólica.
De volada los jóvenes dieron aviso a los servicios de emergencia, mediante al 911, y minutos después se presentaron las ambulancias y patrullas al lugar de los hechos.
No obstante, ya nada se pudo hacer por el chavito, pues los paramédicos solamente pudieron certificar su muerte, por lo que la zona fue acordonada en lo que se esperaba la llegada del Servicio Médico Forense (Semefo), para levantar el cuerpo.
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Finalmente, la madre del joven también se presentó al sitio, donde protagonizó una desgarradora escena, pues la mujer gritaba que no era posible que su hijo estuviera en Chelem y muerto.
Ya que la dama explicó que había dejado a sus hijos en su casa de Mérida, pues ella trabaja los fines de semana. Ante esto, el supuesto hermano del fallecido expresó que su pariente no quería ir al viaje.
Hasta que, él logró convencerlo para que lo acompañara; “yo lo mate, yo lo mate”, sollozaba el joven ante los uniformados.
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