Máe, le chismeamos que en Valladolid se andan registrando fraudes virtuales. De acuerdo con lo que se ha chismeado, al menos se sabe de dos casos de personas a las que les tumbaron lana de su cuenta bancaria, al parecer les “hackearon” su número de tarjeta y luego desde alguna parte del país retiraron el dinero.
Los cuentahabientes solo de dan cuenta de este relajo cuando acuden a checar su saldo y a los que tienen alguna aplicación en el teléfono les llega una notificación de las operaciones que se realizaron.
Hace poco tiempo a un machaque de Quintana Roo le quitaron el dinero que le depositaron sus papás; le llegó una notificación al celular en la que le informaban que había pagado una cuenta en una tienda departamental; le robaron $5,000.
El caso más reciente ocurrió el pasado sábado, a otro chamacón le llegó una notificación a su teléfono en la que le informaban que habían pagado $3,600 por un servicio de Uber, pese a que en la ciudad no hay eas plataforma.
El afectado se comunicó con los ejecutivos de la institución bancaria y se hicieron las verificaciones, le informaron que la operación se había hecho en horas de la madrugada, según se reflejó en el estado de cuenta.
A pesar de comprobar que él no había hecho ese cargo y que alguien le había hecho un chanchullo a su cuenta, los ejecutivos del banco le respondieron que esas transferencias no eran responsabilidad de la institución, por lo que el afectado perdió lo que era su sueldo.
Los hackers obtienen el número de la tarjeta de una base de datos con la que cuentan y al azar se agencian el dinero de alguien.
Otra queja
Hace unos meses, Lilian Osorio Santoyo denunció que le habían retirado de su cuenta más de $100,000, a pesar de que se identificó al presunto defraudador no se hizo nada, incluso el banco no le devolvió el dinero.
La afectada chismeó que este tipo de acciones “vulnera la seguridad” en las instituciones bancarias, de modo que lo mejor será que dejar de usar ese servicio y regresará “a la antigua”, pagar en efectivo.
