Luego de que roló el chisme de los destrozos que causó una unidad policiaca de Hunucmá, alrededor del mediodía de ayer domingo, en el céntrico cruce de las calles 27 y 30, de nueva cuenta se suscitó otro agarrón entre dos naves.
Fue en la conflictiva esquina, donde se halla una terminal de autobuses, que ocurrió un trancazo entre un Atos y March. El conductor del Atos, matrícula ZCR- 510-A, rolaba con preferencia, de Oriente a Poniente, en la 27.
Mientras que la navecita Nissan March, placas 98MW-9B, venía rolando de Norte a Sur, con dirección al parque principal, pero no respetó el alto en ese cruce y fue ahí donde la cosa se puso fea, pues se embarraron.
Ambos guiadores que viajaban con sus familias a gozar de las playas de Sisal y Celestún, pero su viaje se fregó de momento y no les quedó de otra que llamar a sus aseguradoras para resolver el lío que solo dejó daños materiales como saldo.