TIZIMIN.-  “Me encanta el mar, hay quienes se enferman con el juego, las drogas o se hacen políticos, pero a mí me dio por ser navegante”, dice orgulloso Carlos Balderas Ramírez Garrido, a quien las olas llevaron por “accidente” hasta el pequeño puerto de El Cuyo, comisaría de Tizimín, ubicada en el oriente de Yucatán.

El objetivo del septuagenario es llegar al Canal de Panamá para cruzar hacia el océano Pacífico, y de ahí llegar a Baja California Sur, donde lo esperaría su esposa Martina, a quien no ve desde hace casi dos años.