Buen susto se llevaron ayer vecinos del sector San Juan de Tetiz, pues el techo de un tinglado se desplomó debido al paso de los años y la pésima calidad en que fue elaborado.
El hecho puso los pelos de punta a una familia que habita en la calle 30 con 15, cuyo dueño es el señor Felipe Ucán Cuá, pues él y sus familiares se salvaron e quedar pucheados por la techumbre que se vino a bajo.
Tras el tremendo susto, el buen “Lipe”, quien vino hace unos meses de Estados Unidos, dio parte a las autoridades para que verifiquen y evalúen los daños materiales. Según relató, después de caer el aguacero del jueves, Ucán Cua, estaba reunido con su familia en el cuarto de en medio (la cocina), cuando escucharon el estruendo, a eso de las 6 de la tarde, dijo que sonó como si un objeto grande hubiera caído en el techo del corredor.
Al salir a acechar se quedaron con la boca abierta, pues el cuarto de a lado, es decir el de 6 por 4 metros de ancho, había colapsado. Fue apenas ayer que llegaron al lugar agentes de la Policía Municipal y bomberos, así como oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública.
Minutos después asomó personal de Protección Civil estatal, para efectuar sus diligencias. Luego de una exhaustiva revisión, determinaron que no existía riesgo en los demás cuartos. Cabe destacar que la construcción que valió camotes, tenía cerca de 70 años de antigüedad.
