Pero ¡Que valor de la madre! Pues un nené “gigante” nació de forma natural, sin anestesia epidural, analgésicos o instrumentos quirúrgicos. Esta chiquita, no tan chiquita,  pesó  6.3 kilos.

Se trata del quinto chamaco de una familia de Dagestankiye Ogni, en la República de Daguestán, al noreste de Rusia, que hasta el momento no han querido dar ninguna entrevista.

La bebé tiene algunas complicaciones en el oído y podría desarrollar algunas otras, ya que por el peso pueden sufrir alteraciones en el corazón, bajas en el nivel de azúcar o lesiones en el hombro al pasar por el canal de parto.

Aunque un bebé de seis kilos es insólito, el Récord Guinness es de un bebé de 10.2 kilos que nació en Italia en septiembre de 1955.

Otros casos son Carleigh de seis kilos en Florida en mayo del 2017; Brian Jr. en 2017 pesó 6.06 kilos en Australia; Arancha pesó 7.010 kilos en Madrid en 2006.