tilikum
tilikum

El cautiverio para las orcas es una situación de vida que las convierte en una auténtica bomba de tiempo. El estrés llega a afectar a la ballena a tal grado que muchas veces atacan a su propia entrenadora.

Visitar un zoológico o un acuario puede ser una experiencia muy grata para las personas que lo visitan, sin embargo las orcas pueden contar otra historia. Desde hace un par de décadas se han registrado varios ataques de ballena en cautiverio a su entrenadora, desde la famosa Tilikum hasta todos sus descendientes.

También te puede interesar: Cae doñita a un estanque y es devorada por dos caimanes

Abolición del cautiverio

Actualmente, existen varios movimientos sociales que buscan de manera ferviente la abolición de estas prácticas, en las que se exponen a un estrés mayor a estos animales, y que las convierte en una amenaza al acecho a cualquier persona que se les acerque.

De acuerdo con la organización animalistas, la falta de espacio, el estrés social, la presencia de visitantes, enfermedades y otros problemas de salud son los principales desafíos a los que se ven expuestos los animales en estos centros.

La tragedia de Tilikum

Tilikum fue una orca macho que fue puesta en cautiverio en el SeaLand of the Pacific, un zoológico/acuario en Victoria, Canadá. Desde su captura hasta su muerte, Tilikum atacó a tres personas y se convirtió en el espécimen con el historial más extenso de ataques a seres humanos.

Y fue el 20 de febrero de 1991 cuando Keltie Byrne de 20 años entró a trabajar al acuario como entrenadora, tiempo parcia, ya que estudiaba biología marina en la universidad.

Lo que ella no se imaginaba era que no saldría con vida del zoológico, pues Tilikum la arrastraría hasta el fondo de la piscina, mientras ella clamaba: “No quiero morir”; todo en presencia de cientos de turistas que se habían reunido a ver el show.

El veredicto de la investigación forense reveló que la causa de muerte de la mujer había sido: “Ahogamiento debido a inmersión forzosa por orca (asesina)”.

Otro ataque

Lamentablemente no fue el primer y único ataque de Tilikum, su situación proliferó en una serie de exabruptos que afectó a más personas.

Síguenos en Google News

Síguenos en Facebook ¡Al chile! Yucatán