Se encontraron los rastros de un pequeño dinosaurio en el estómago de un joven Tiranosaurio Rex; se revelan indicios de la dieta de estos animales
Este nuevo descubrimiento ha marcado una gran diferencia entre los tiranosaurios, pues en comparación con los enormes adultos estaban en la cima de la cadena alimenticia, todo indica a que los tiranosaurio jóvenes dependían de presas más pequeñas.
Fue mediante un comunicado emitido el día de ayer, lunes 11 de diciembre, que los paleontólogos de la Universidad de Calgary y el Museo Royal Tryll descubrieron lo que fue la última comida de un joven Tiranosaurio Rex.
Los paleontólogos encontraron el esqueleto de un ejemplar juvenil de Gorgosaurus, una especie de Tiranosaurio Rex de gran tamaño que vivió hace 75 millones de años en lo que hoy es el territorio de Alberta, Canadá.
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Dentro de la región intestinal de este animal se encontraron las patas traseras de dos dinosaurios terópodos jóvenes, parecidos a pájaros, de la especie Citipes elegans.
Cabe mencionar que, no fue inmediatamente obvio que había una presa dentro del Rex, sino que fue durante el trabajo de preparación en el laboratorio del museo, que los investigadores notaron pequeños huecos del dedo del pie que sobresalían de la caja torácica.
“Se quitó la roca dentro de la caja torácica para exponer lo que estaba escondido en su interior. Y he aquí que en su estómago estaban las patas traseras completas de dos crías de dinosaurio, ambas de menos de un año”, indicó François Therrien del Museo Royal Tyrrell.
“Ésta es la primera vez que se encuentra contenido estomacal tan bien conservado dentro del esqueleto de una especie de tiranosaurio de gran tamaño”
Gracias a este descubrimiento ha ayudado a los investigadores a saber que a medida que el cuerpo de un tiranosaurio cambiaba a lo largo de su vida, también cambiaba su dieta.
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