La mujer hizo la denuncia desesperada en la Policía, se montó un amplio operativo pero él le mandó un mensaje donde decía que “tenía buena onda con ella pero quería estar con sus amigos”.
SANTIAGO DEL ESTERO, ARG.- El insólito hecho comenzó cerca de las 23.30 del lunes, cuando una joven de 28 años, con domicilio en Santa María, se presentó asustada en la Comisaría Décima y contó que dos sujetos habían abordado a su “amigovio” a la salida de un motel alojamiento y lo habían llevado “secuestrado”.
La joven contó que cerca de las 13 ingresó al albergue ubicado sobre avenida Madre de Ciudades donde pasaron más de diez horas, y donde además el sujeto había consumido sustancias tóxicas.
Le dijeron que se trataba de un secuestro
Al salir del motel subieron al auto de su pareja, un Volkswagen y allí, según sus dichos, fueron interceptados por dos hombres encapuchados, que los amenazaron y se subieron al rodado, manifestándoles que se trataba de un secuestro.
Según el alterado relato de la mujer, los cuatro se trasladaron hasta el barrio Borges y al llegar a la esquina de la casa del imputado los varones descendieron del rodado dejándola a ella dentro del vehículo.
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Prefirió pedir ayuda a la policía
A los pocos minutos recibió un llamado telefónico de un número privado que indicaba que su acompañante se encontraba en la rotonda del barrio Autonomía, y que ella debía ir a ese lugar. Por temor la joven prefirió pedir ayuda a la policía.
De inmediato los efectivos se hicieron presentes en el lugar, pero no estaba el supuesto secuestrado por lo que dieron intervención a los efectivos de la Comisaría 49, quienes llevaron a la mujer a esa dependencia.
Confesó que estaba con sus amigos
Mientras estaba allí, la joven recibió un mensaje por parte del acusado quien le decía que estaba todo bien. Que tenía “buena onda” con ella, pero que estaba con amigos, que no se preocupe, por lo que la mujer se retiró de la Comisaría.
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