Una madre se llevó una desagradable sorpresa; encontró una chola en el armario de su hijo; el joven mató y cercenó a un indigente
No sería sorprendente decir que, en Estados Unidos se han presentados casos que han causado verdadero terror y se han popularizado a nivel mundial, a grado de parecer que fueron sacados de una pelí.
La historia de Brian Cohee es uno de estos, pues con tan solo 21 años de edad, el joven asesinó a sangre fría a un ingente, a quien le cortó su cabeza y la guardó en su clóset a modo de premio, para “satisfacer su fascinación por el morbo”.
Fue la misma madre del muchacho quien descubrió la cabeza y las manos en descomposición del hombre, quien en vida se llamaba Warren Barnes, de 69 años de edad.
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De volada, tras el escalofriante hallazgo, la mamá del jovencito dio aviso a la policía. Cabe mencionar que, las imágenes fueron captadas por la cámara de una patrulla.
A pesar de sus alegatos de inocencia por demencia, el tribunal condenó a Brian a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional: “Warren Barnes perdió la vida de la forma más violenta”.
“Este resultado demuestra los controles y equilibrios que existen dentro del sistema de justicia penal. La justicia prevaleció cuando el jurado emitió veredictos de culpabilidad que responsabilizaba legalmente al acusado de sus horribles crímenes”.
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