PETO.— “Fui esposado, me golpearon en la cara, cabeza y otras partes del cuerpo, luego me inventaron expedientes y de paso me roban 1,000 pesos en efectivo. Para salir de la cárcel me pidieron $500 y para sacar mi vehículo $7,000”, denunció públicamente José M. Hernández Estrada, de 34 años de edad.

Sin embargo, el Ayuntamiento de Peto negó la agresión y extorsión.

“¿Cómo es posible que esto me sucediera? Después de trabajar por más de una semana en Tulum, después de cobrar, decidí regresar al pueblo con mis familiares, pero alrededor de las 5 de la tarde de ayer sábado cuando regresaba a Peto, mi vehículo falló, y para no quedarnos en la carretera, mis familiares se trasladaron a Peto en busca de apoyo del mecánico.

Se remolcó mi vehículo hasta la caseta de la Policía Municipal que está por ese tramo.

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“Pedí apoyo a la Policía Municipal y pregunté si podía dejar mi vehículo en ese lugar; de inicio me dieron permiso, pero otros uniformados que llegaron me hicieron soplar tres ocasiones en la prueba del alcoholímetro y dijeron que tenía 245 (Gramos de alcohol por 210 litros de aliento), luego revisaron mis pertenencias y vi que la Policía no solo se adueñó de mi dinero, también me esposaron con violencia y me golpearon salvajemente en la cara y la cabeza.

“Ellos armaron mi expediente a su manera y al salir de la cárcel, cuando me entregaron mis pertenencias, faltaban $1,000. Lo peor es que el licenciado del área jurídica del H. Ayuntamiento de Peto pidió $500 para que saliera del bote y $7,000 para recuperar mi vehículo del corralón, aunque tengo problemas desde ayer con el carro por los desperfectos que tuvo”, señaló el denunciante.

“Cuando reclamé al licenciado los $1,000 que me faltan, dijo que no sabe nada y que si quería que mi vehículo saliera, tenía que pagar $3,000 bajo el agua.

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“Luego amenazó que no puedo acusarlos porque todo lo grabaron y dijeron que me puse rijoso, según ellos intenté apoderarme del volante cuando me tenían esposado y dijeron incluso que podría estar bajo los influjos de la droga, pero yo digo, nada de eso es cierto, espero que den a conocer y muestren cómo me golpearon”, resaltó Hernández Estrada.

El agredido resaltó que denunciará ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey).

Por su parte, las autoridades municipales indicaron que Hernández Estrada “realizó una intempestiva maniobra, por lo que los agentes se acercaron y detectaron un fuerte olor a alcohol, por lo que se procedió a una prueba de alcoholimetría y salió posiiva”.