Una familia dejó a sus lomitos encargados en una escuela de perros y se los regresaron muertos. “Era una persona de confianza”
A través de la plataforma de X (antes Twitter) una familia denunció que había dejado encargados a sus lomitos en una guardería de mascotas, sin embargo, se los regresaron muertos. Esta es la historia de Nala y Tango, un bóxer y un bulldog que vivieron maltrato animal.
De acuerdo a la denunciante, el pasado lunes un hombre identificado como Alfredo “A” acudió al domicilio de la familia para recoger a los perritos. Esto con el fin de llevarlos a la guardería, ya que su familia tenía que salir de la ciudad.
“Cabe aclarar que era una persona de confianza, ya habíamos dejado a su cargo a mis perritos varias veces (ya que funcionaba como escuelita de perros)” – comentó la denunciante en hilo de X.
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Los primeros dos días (el lunes y el martes) la persona encargada mandó fotos de los perritos. Sin embargo, el miércoles dejó de responder los mensajes. A partir de ese día dejó de mandar fotos de los lomitos.
La familia, al regresar el jueves, preguntaron por sus peluditos, pero no obtuvieron respuesta.
Fue hasta la mañana del viernes que Alfredo “A” presentó a los dos perritos sin vida. Según él, ambos se habían asfixiado solos e incluso intentó echarle la culpa a un golpe de calor.
¿El presunto maltratador irá a la cárcel?
Pero, al revisar los cuerpos de los perritos, sus dueños notaron que tenían heridas en su cuello. Incluso encontraron señales de tortura.
Tras levantar un reporte en la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) de la CDMX, la institución se puso en contacto con ellos para el seguimiento legal.
Cabe mencionar que, de acuerdo a una actualización en su cuenta de Instagram (@whothefuckismaaar), la institución les dijo que no pueden hacer nada. Esto es debido a que no existe alguna evidencia de que cometió el presunto crimen.
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