Cafetaleros de Tapachula lo volvió a hacer y ahora se coronó campeón del Torneo Clausura 2018 del Ascenso MX al empatar 2-2 ante Leones Negros de la U. de G., para un global de 3-2.
En su duelo de vuelta disputado en el estadio Jalisco, por la U. de G. marcaron Efrén Mendoza, en el minuto 38, y Jesús Vázquez, en el 42, mientras que por la visita lo hicieron Christian Bermúdez, en el 34, y Luis Hernández, en el 61.
Sin embargo, la anotación conseguida en el encuentro de ida por el argentino Leonardo Ramos fue suficiente para mantener la ventaja y coronarse con un 3-2 global.
Con todo para conseguir el resultado que le permitiera coronarse en el certamen, el conjunto “Melenudo” ni tardo ni perezoso se hizo de la pelota para generar acciones de peligro sobre el marco del argentino Gaspar Servio.
La visita, por su parte, jugó su partido como lo hizo ante sus dos anteriores víctimas y esperó hacer daño en la contra para luego hacer lo suyo con la desesperación del anfitrión por tratar de recuperarse.
Y por momentos el cuadro chiapaneco tuvo en un puño al rival tapatío, al que mantuvo abajo en el marcador en el minuto 34 con el tanto de Christian Bermúdez.
Sin embargo, el 11 estudiantil tuvo la virtud de responder de inmediato para emparejar las cosas 1-1 (2-1 global), gracias a la anotación conseguida por Efrén Mendoza.
Motivado e impulsado por su afición, Leones Negros le dio la vuelta al resultado con el golazo de Jesús Vázquez, a quien le dio el espacio y sacó derechazo angulado para poner las cosas 2-1.
Cafetaleros se lanzó al frente para conseguir la paridad 2-2 (3-2 global) en el minuto 61 con el gol de Luis Hernández.
El final mantuvo a los aficionados literalmente al filo de la butaca, ya que mientras Leones Negros tuvo para emparejar el marcador y llevarlo a la prórroga o más allá, Cafetaleros también tuvo sus opciones para liquidar, pero ninguno estuvo certero.
Con este resultado, la escuadra chiapaneca se corona en el Clausura 2018 y disputará ante Alebrijes de Oaxaca la final del ascenso al máximo circuito, con la salvedad de que ninguno tiene derecho a subir.
