El Hanal Pixan es la celebración en la que se ofrenda comida y bebida a las ánimas de los fieles difuntos en Yucatán.

En Yucatán aún se mantiene viva una tradición que año tras año cobra más fuerza, a pesar de la revolución de las personas y los avances tecnológicos en nuestro estado, el Día de Muertos o Hanal Pixan en Yucatán se niega a morir. No solo porque es una costumbre auténtica si no porque generaciones actuales insisten en mantenerla viva año tras año, pero… ¿Qué es el Hanal Pixan?

¿Qué es el Hanal Pixan?

El Hanal Pixan es la celebración en la que se ofrenda comida y bebida a las ánimas de los fieles difuntos en Yucatán. La celebración en Yucatán es de 3 días: 31 de octubre, 1 de noviembre y 2 de noviembre.

Una celebración antigua

Esta celebración es una de las más antiguas de las raíces mayas. Se cree que durante estos díaslas almas de los difuntos ‘tienen permiso’ para regresar a la tierra y disfrutar de las ofrendas que le otorgan sus amigos y familiares.

El rito más importante durante Día de Muertos

Si bien, es el rito más importante de esta ceremonia practicada por la mayoría de las familias de la entidad durante el Día de Muertos. Para muchos otros, la definen como la ceremonia realizada para honrar a nuestros ancestros, para establecer y mantener el vínculo entre vivos y muertos.

¿Qué días se les festeja a los muertos en Yucatán?

El 31 de octubre se les dedica a los niños y se le suele llamar como U Hanal Palal. El primero de noviembre es dedicado a los adultos muertos y se le conoce también como U Hanal Nucuch Uinicoob, y el 2 de noviembre es el U Hanal Pixanoob llamado en algunos lugares ‘misa pixán’, pues este día se celebra una misa dedicada a todas ánimas.

Esta tradición y costumbre se hereda de generación en generación, y es celebra por los yucatecos de todas las posiciones socioeconómicas, preferencias políticas, niveles educativos y credos.

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Esto le colocan a los niños según las creencias

Es costumbre que, en algunos pueblos, e incluso en la ciudad, los niños usen una pequeña banda de color negro o rojo en la muñeca de la mano para evitar, según las creencias, las ánimas se los lleven.

En los municipios del interior del estado es una tradición viviente, los altares adornan cada vivienda, el olor de las flores perfuman los hogares y las velas iluminan el paso de las ánimas.

El altar durante Hanal Pixan

El altar varía dependiendo a quien se celebre. Algunas de las ofrendas que se les ponen a los niños son juguetes, dulces y demás golosinas que le gustaban. En el caso de un altar de adultos se suele poner licores, cigarros o algo en específico que al difunto que se le recuerda le gustaba. En general otros alimentos que se ponen en el altar están: flores, veladoras, vaso con agua, frutas, dulces, su comida preferida y otros elementos más.

Los altares de muertos en la ciudad

Mientras tanto en la ciudad, los altares también están presentes, sobre todo en la Plaza Grande donde año tras año se realizan demostraciones para recordar a los que ya no están, a los que se fueron por la gracia de Dios al paraíso, según el credo de muchos yucatecos.

Familias decoran el altar

Durante la colocación del altar, las familias lo decoran según sus posibilidades económicas y gustos, por ejemplo, las flores silvestres tradicionales son sustituidas por gladiolas, o  claveles; los dulces, por pasteles y en vez del pan tradicional, muchos ponen donas glaseadas; el atole y el balché, es sustituido por vinos, licores o hasta cerveza.

Hay quienes no elaboran sus altares

Hay familias que no elaboran sus altares, pero no por ello dejan de celebrar estos días con fervor y respeto, muchos optan por una reunión familiar realizando el tradicional pib de pollo para luego ofrecerlo a las ánimas y compartirlo en la mesa.

Con el pasar de los años, son pocos quienes cocinan enterrando los alimentos ofrendados, la mayoría los cuece en hornos domésticos o los envía a las panaderías. Otros tantos los adquieren en restaurantes y supermercados.

De una u otra forma, los yucatecos aún mantienen viva esta tradición y la reafirman anualmente, aunque muchos aún desconozcan su origen.

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