GUERRERO.- Magdalena Aguilar Romero de 25 años de edad fue asesinada el 22 de enero de 2018 en Taxco de Alarcón en Guerrero.

Su cuerpo fue hallado en una olla de peltre y otras partes estaban en un refrigerador, dentro de su casa en la que vendía pozole. Fue desmembrada y cocinada por su exesposo César Gómez Arciniega.

El sábado, César tenía que entregarle a los niños a Magdalena. Acordaron verse a la 1:00 de la tarde en zócalo de Taxco, no llegó y le propuso que mejor a las 2:00; tampoco llegó, después que a las 5:00 y tampoco. Entonces fue cuando Magdalena decidió ir a buscarlo hasta su casa en Barrio de los Abodes, en la calle Guadalupe.

A las 5:00 pm Magdalena se comunicó con su madre, le dijo que la esperaba para ir juntas a la misa de cada año de su bisabuela. Magdalena no llegó a la misa. María de los Ángeles le mandó un primer mensaje por WhatsApp, con una imagen; después otro donde le avisó que la misa había terminado y que ya se iba al rezo, y un tercero: “¿qué pasó?”. Este último ya no llegó.

Todas la llamadas mandaban directamente al buzón, al siguiente día la buscaron, pero nada. La familia nunca perdió de vista que los principales sospechosos eran César y su madre. El sábado 20 de enero la madre recibió una llamada, el mensaje era claro “Su hija está en la casa de César, la tienen en cacerolas”

La encontraron nueve días después de haber reportado su desaparición. En un local de César, donde vendía pozole con su madre en la tercera calle de “Los Adobes”. Magdalena estaba desmembrada, dentro de un refrigerador. 

En la olla de peltre estaban las extremidades superiores e inferiores cocidas, en una bolsa de plástico la pelvis, también cocida y el resto del cuerpo estaba semicongelado. 

La Fiscalía General de Justicia del Estado de Guerrero, localizó el cuerpo desmembrado y parte de este guisado en chile rojo. El exmarido se encuentra hasta el momento desaparecido.