Día de las madres en los cementerios de Mérida

Este 10 de mayo, es una época para estar con la mujer que nos dio la vida, aunque ya no esté a nuestro lado, así se vivió el Día de las madres en los cementerios de Mérida

Por el Día de las madres en los cementerios de Mérida se vio un aumento en las visitas, personas que llegaron a dejarle flores a sus progenitoras que se adelantaron a la otra vida.

“Cómo quisiera que tu vivieras, que tus ojitos jamás se hubieran cerrado nunca y estar mirándolos”, fragmento de Amor Eterno: Juan Gabriel

Porque el amor de una madre, cuando esta es llamada a la presencia de Dios, trasciende el plano de lo terrenal y alcanza una nueva dimensión en lo espiritual, mamá nunca deja de estar en nosotros aun en su ausencia física; es por eso que, decenas de personas desafiaron las calcinantes temperaturas que estos días se registran en Mérida, para rendir tributo de amor este 10 de mayo a las madres fallecidas y que descansan en los cementerios de la capital yucateca.

Luz María Gómez Ac, es maestra de educación artística y directora del Ballet Juvenil del Gobierno del Estado, ella en su perfil de Facebook subió la imagen de una tumba ornamentada con flores frescas que llevó a su madre difunta desde el jueves 9 de mayo y refiere: “Visitando al amor de mi vida, ya que mañana nos tocará festejar a las mamitas de las escuelas”.

“Por cierto, hoy unas alumnas platicaban sobre lo triste que es no tener a su mamá a su lado en estos días y de repente una me preguntó: Maestra ¿Su mamá está con usted?”, a lo que sin pensarlo le respondí “No”…(y cuando me escuche decir ese “no”, inmediatamente corregí)… Bueno, ella ya no está físicamente, pero sí está conmigo, vive en mi corazón y va conmigo a todas partes y cuando las mamitas viven en nuestro corazón no podemos ser malas personas, ni tener odio o maldad en él, debemos darles un hogar bonito, feliz y en paz” agregó.

“Cómo maestros de artes en estos días preparamos festivales, detalles, regalos o tarjetas para las mamás con los alumnos, pero igual nos encontramos con los que desafortunadamente ya no la tienen a su lado por diversas razones, no olvidemos ser empáticos. Nunca se sabe lo que lleva ese corazoncito adentro” concluyó.

Con cariño, los hijos y nietos, de todas las edades y condiciones sociales, salieron al encuentros de las amadas madres para visitar sus tumbas, tributarles flores y una plegaria, hacer labores de limpieza y chapeo en torno a la sepultura, tal fue el caso del  Cementerio General donde se notó un aforo mucho mayor de lo habitual tratándose de mitad de semana.

Ramos y arreglos florales, cubeta en mano, escoba y cepillo, coa y machete, los familiares dedicaron un tiempo de éste día para rememorar a los seres que en vida dieron vida y amor, y si cálido fue el amor que prodigaron no menos es la temperatura ambiente, que obliga a los visitantes a echan mono de sombrillas, gorras y sombreros paras protegerse del sol, el uso de filtros y bloqueadores solares aplicados sobre la piel; y a esa afanosa búsqueda de la sombra al refugio de la fronda de los árboles se sumó al consumo de botellas de agua y bebidas refrescantes para mitigar el calor, incluso hasta agua de coco helada se ofrece en el campo santo.

La demanda de agua para lavar las tumbas y llenar los floreros es alta, los tubos de abastecimiento dispersos pro todo el lugar apenas y son suficientes para satisfacerla, lo mismo pasa con la venta de flores, con preciso de entre $150 y $250 por ramo hasta arreglos de entre $300 y $600, un ramillete de margaritas entre $70 y $100, una sola rosa $35, no son obstáculo para que las familias adquieran varias de éstas

Aunque solícitos y dispuestos siempre a prestar sus servicios, pocas personas recurren a quienes se ofrecen para limpiar las tumbas y acarrear cubetas con agua, un servicio que podría costar de entre $80 y $150 dependiendo del lugar, la distancia y la complejidad del trabajo.

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Quienes laboran en ésta actividad en el cementerio no creen que el fin de semana las cosas cambien a mejor, la mayoría de los visitantes ya llegan preparados y dispuestos para hacer la limpieza y depositar las flores, quienes no lo hicieron este 10 de mayo quizá no lo harán el sábado o el domingo y menos si el calor sigue fustigando el ambiente, pero no descartan un “milagro” por el amor de las mamás ausentes en lo físico.

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