El Barcelona inició 2018 con un empate al visitar a Balaídos ante el Celta por 1-1 dentro de la ida de los Octavos de Final de la Copa del Rey.
Más allá de salir vivo de Vigo, el Barcelona tiene cosas por festejar en este encuentro, sobre todo por el regreso de Ousmane Dembelé, quien regresó formalmente después de estar cuatro meses lesionado.
José Arnáiz abrió el marcador en un contragolpe de área a área, es decir, de su lado de la cancha, con el Celta descolocado. La secuencia tuvo tres jugadores: André Gomes recuperó la pelota en la delantera de su área; André Gomes buscó a Denis Suárez, que avanzó en la contra sin ritmo; Denis Suárez le devolvió el balón a André Gomes, que aguantó hasta encontrar el centro lateral perfecto; el joven talaverano acompañó la jugada por la zona central del área que terminó marcando el gol.
Posteriormente, Sisto, Aspas, Jozabed y Maxi Gómez diseñaron una jugada con tiralíneas, en la que, pase a pase, tuvo un primer remate al travesaño de Aspas y acto seguido un cañonazo lateral de Sisto que se convirtió en el gol de empate.
La vuelta se llevará a cabo la próxima semana en el Camp Nou.
