La historia comenzó hace cuatro años cuando el hijo único murió en un accidente de motocicleta. Por dos días, el cuerpo del joven estuvo desaparecido, pero apenas fue encontrado, sus progenitores le pidieron a un urólogo que le extrajera el semen para congelarlo. Afortunadamente para ellos, el esperma puede sobrevivir hasta tres días en un cadáver.

La muestra fue recibida por el doctor David Smotrich, quien asegura que se ha saltado las leyes británicas para ayudar a reconocidas celebridades.

El tratamiento en total costó aproximadamente 130 mil 424 dólares y dio como resultado un niño que nació en territorio estadounidense en 2015. Los “abuelos” llevaron al pequeño a Inglaterra figurando en los registros como padres de éste.